Revive lo que se vivió en The Beatles Symphonic Fantasy en la Arena CDMX: una noche llena de música, nostalgia y emoción, con los grandes éxitos del cuarteto de Liverpool en versión sinfónica.
El pasado miércoles 3 de julio, la Arena Ciudad de México se llenó de nostalgia y música con el show The Beatles Symphonic Fantasy. Este homenaje sinfónico al cuarteto de Liverpool reunió a más de 30 músicos y cantantes que se rifaron reinterpretando los clásicos de la banda con arreglos orquestales. Todo esto fue idea del argentino Damián Mahler, quien armó un recorrido por distintas etapas de los Beatles: desde Love Me Do hasta The End.
“La intención es llevar al público por un viaje completo a través de la música de Los Beatles”,
contó Mahler en una entrevista.
Y sí que lo logró. Desde el primer acorde, el lugar se transformó. Fue como estar en otro tiempo, pero con un toque nuevo.
Así se vivió el concierto
Poco después de las 9:30 p.m., comenzó el show con Come Together. Cuando apareció en el escenario un vocalista con el look de Lennon —abrigo largo y lentes redondos—, la gente se soltó en gritos.
A lo largo de la noche, fueron sonando rolas como Can’t Buy Me Love, All My Loving, Eight Days a Week, I Saw Her Standing There, Paperback Writer y muchas más. La Arena estaba hasta el tope, alrededor de 6 mil personas coreando cada canción. El ambiente era de fiesta y complicidad entre fans de todas las edades.
Uno de los momentos más chidos fue cuando sonó Yellow Submarine y el propio Mahler pidió al público que cantara. Y todos lo hicieron, sin pena. Después llegó un instante más tranquilo con Blackbird, y las luces de los celulares se alzaron, creando un mar de lucecitas que acompañaban la melodía. Luego sonó Yesterday, y el efecto fue el mismo: pura emoción.
El cierre con broche de oro
Para cerrar, el vocalista que hacía de Lennon cantó Imagine… Todo el lugar guardó silencio. Fue un momento que puso la piel chinita. Y cuando creíamos que eso era todo, remataron con Hey Jude y Love Me Do. El público se paró, aplaudió, gritó, y algunos hasta lloraron.
El show fue justo lo que prometieron: una forma distinta y emocionante de revivir la música de los Beatles. Como dijeron los organizadores de Sira Música, fue una
“manera única de redescubrir su música atemporal”.
The Beatles Symphonic Fantasy dejó claro que, aunque pasen los años, las canciones del cuarteto siguen vivas en los oídos —y en el corazón— de miles. Y sí, esa noche en la Arena CDMX, la Beatlemanía volvió a sentirse con todo.
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