No deja de sorprendernos cada edición del Festival Vive Latino. Hay momentos inolvidables y esta no fue la excepción. Todos y cada uno de nosotros acudimos con un movimiento que nos une y ese es, la música. El VL ofrece más que eso; entre sus amenidades, hay muchas actividades con algunos patrocinadores que hacen más divertido este encuentro. Queremos platicarles que nos llevamos muy buenas sorpresas de esta edición, y es que los organizadores se pusieron las pilas y nos regalaron cosas que probablemente en otros festivales fueron áreas de oportunidad.
Entre ellas, los bebederos de agua, donde podías llevar tu cilindro o vaso y llenarlo las veces que quisieras. Fue un parototote. Otra de las cosas fueron los sanitarios, que en esta edición se encontraban casi en cualquier lado y en cualquier escenario, y no solo eso, sino que estaban decentemente limpios y con la ventaja de poder lavarte las manos con jabón y agua, una de las cosas que te deja una buena sensación.
En la edición pasada se hablaba mucho de los residuos y latas que quedaban al final. Una de las novedades que encontramos fue que casi todas las áreas se encontraban limpias; un gran trabajo de todos los chicos encargados de intendencia que, en realidad, se llevaron los aplausos. No hay nada como disfrutar de un lugar sin basura.
Y algo que no esperábamos percibir fue el gran audio con el que contaban los escenarios. Tuvimos oportunidad de estar en todos y cada uno de los escenarios y disfrutar de un gran equipo de audio y sus buenos ingenieros y asistentes. Por ahí percibimos algunas cosas muy leves, pero para nada arruinaron la experiencia.
La última edición del Festival Vive Latino fue una experiencia verdaderamente memorable, donde la música, la comodidad y la conciencia ambiental se unieron para crear un evento excepcional. En resumen, el Festival Vive Latino demostró una vez más por qué es uno de los eventos musicales más destacados, combinando la pasión por la música con el compromiso con la comodidad y la sostenibilidad. Sin duda, dejó una impresión duradera en todos los que tuvieron el placer de asistir.
Sobre la música hablaremos en otra edición. Gracias por leernos.
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